Page 45 - Autocuidado y fortalecimiento emocional
P. 45
• Al acabar la exhalación, haz una pausa y espera pacientemente hasta que el
cuerpo inicie la siguiente inhalación.
• Cada respiración a través de la nariz es lenta y tranquila.
• Al llegar al punto máximo de inhalación, libera lentamente el aire por la boca
abierta.
• Luego, sin cerrar la boca y con la mandíbula relajada, haz una pausa y espera
conscientemente hasta que el cuerpo necesite volver a respirar.
• Después de dos o tres respiraciones, permite que el tiempo entre una y otra
respiración sea un momento de relajación total para tu organismo.
• Luego, respira para una zona concreta de tu cuerpo que necesite relajarse
especialmente.
• Respira con este ritmo varias veces.
• La clave para marcar la pausa entre dos respiraciones es mantenerse
consciente y centrado, porque si la mente se distrae vuelve fácilmente a su
patrón contraído.
4. Respiración para controlar el estrés y dormir bien
• Se aconseja repetir este ejercicio dos veces al día.
• Coloca la punta de la lengua en el paladar, detrás de los dientes incisivos
superiores.
• Inhala por la nariz durante 4 segundos, aguanta la respiración 7 segundos.
• Exhala por la boca frunciendo los labios y haciendo ruido (como si soplaras)
durante 8 segundos.
• Haz cuatro respiraciones. Curso Autocuidado y Fortalecimiento Emocional
5. Ejercicio para oxigenar cada célula
Este ejercicio es una propuesta de Wim Hof para limpiar el cuerpo de dióxido
de carbono acumulado y oxigenar, sobre todo, el sistema nervioso. El único
inconveniente cuando el organismo no está acostumbrado a tanta cantidad de
oxígeno es la posible hiperventilación. Si esto ocurre, basta con volver a respirar a
un ritmo normal.
• Haz este ejercicio al levantarte o con el estómago vacío.
45